Las placas aislantes térmicas son un elemento fundamental en la construcción para garantizar un adecuado aislamiento en muros, techos y suelos. Fabricadas con poliestireno expandido (EPS) de alta densidad, estas placas ofrecen excelentes propiedades de aislamiento térmico, resistencia a la compresión y durabilidad. Con dimensiones estándar de 120 cm x 60 cm x 5 cm y un peso ligero de 1,5 kg por placa, son fáciles de manipular e instalar en obras de construcción. Su capacidad para reducir la transferencia de calor, su resistencia a la compresión de 150 kPa y su temperatura de servicio de -50°C a 75°C las hacen ideales para una amplia gama de condiciones climáticas. Además, su cumplimiento con normativas de seguridad y medio ambiente, su reciclabilidad y su compatibilidad con sistemas de construcción tradicionales las convierten en una opción ecoamigable y sostenible para proyectos de construcción.

Características de placas aislante térmico

Material: Poliestireno expandido (EPS) de alta densidad

Las placas aislantes térmicas están fabricadas con poliestireno expandido (EPS) de alta densidad, un material conocido por su excelente capacidad de aislamiento térmico. El EPS es un material ligero que ofrece una alta resistencia a la compresión, lo que lo hace ideal para su uso en la construcción. Además, el EPS es resistente a la humedad, lo que garantiza su durabilidad a largo plazo tanto en interiores como en exteriores.

Dimensiones y Peso

Las placas aislantes térmicas tienen unas dimensiones estándar de 120 cm x 60 cm x 5 cm, lo que facilita su manipulación e instalación. Con un peso de 1,5 kg por placa, son fáciles de transportar y colocar, lo que agiliza el proceso de instalación en obras de construcción.

Conductividad térmica y Resistencia a la compresión

La conductividad térmica de las placas aislantes térmicas es de 0,035 W/(m·K), lo que indica su capacidad para reducir la transferencia de calor a través de muros, techos y suelos. Además, presentan una resistencia a la compresión de 150 kPa, lo que garantiza su estabilidad y durabilidad en aplicaciones de carga.

Temperatura de servicio y Inflamabilidad

Las placas aislantes térmicas tienen una temperatura de servicio que va desde -50°C a 75°C, lo que las hace aptas para su uso en una amplia gama de condiciones climáticas. En cuanto a su inflamabilidad, cumplen con la Clase E según la normativa vigente, lo que garantiza su seguridad en caso de incendios.

Funcionalidades Clave

Las placas aislantes térmicas ofrecen un aislamiento térmico eficiente que ayuda a reducir las pérdidas de calor en invierno y las ganancias en verano, lo que se traduce en un mayor confort térmico en el interior de la vivienda. Además, contribuyen a la sostenibilidad y al ahorro energético al reducir la demanda de calefacción y refrigeración.

Características Adicionales

Estas placas aislantes térmicas cumplen con normativas de seguridad y medio ambiente, lo que garantiza su uso seguro y respetuoso con el entorno. Son reciclables, lo que las convierte en una opción ecoamigable, y presentan una durabilidad a largo plazo que las hace ideales para aplicaciones de construcción sostenible. Además, son compatibles con sistemas de construcción tradicionales, lo que facilita su integración en proyectos existentes.

Tipos de placas aislantes térmicas

1. Poliestireno expandido (EPS)

El poliestireno expandido, también conocido como icopor, es un material ligero y económico que se utiliza comúnmente como aislante térmico. Este tipo de placa aislante térmica es eficaz para reducir la transferencia de calor y frío, lo que ayuda a mantener la temperatura interior de los espacios. Además, el EPS es resistente a la humedad y fácil de instalar, lo que lo convierte en una opción popular para proyectos de construcción.

2. Poliuretano (PUR)

Las placas aislantes térmicas de poliuretano son conocidas por su excelente capacidad de aislamiento térmico. Este material es más eficiente en términos de espesor en comparación con otros tipos de aislantes, lo que lo hace ideal para espacios donde el espacio es limitado. El poliuretano es resistente a la humedad y a la compresión, lo que garantiza una larga vida útil del aislante térmico. Además, su fácil instalación y versatilidad lo convierten en una opción atractiva para diferentes aplicaciones de aislamiento.