Las patas hierro son una opción destacada en el mundo del mobiliario por su durabilidad, resistencia y versatilidad. Fabricadas principalmente en acero de alta resistencia, estas patas son ideales para soportar grandes cargas y resistir el desgaste del tiempo, gracias a su tratamiento anticorrosivo y acabados de pintura electrostática que mejoran su apariencia y protegen el material. 

Con una variedad de dimensiones, formas y colores, las patas de hierro pueden adaptarse a diferentes estilos de muebles, desde mesas y escritorios hasta bancas, tanto para interiores como exteriores. Además, su diseño robusto y la posibilidad de incluir refuerzos internos o mecanismos de ajuste de altura las convierten en una solución práctica y estética para cualquier espacio. 

Características de las patas de hierro

Materiales de construcción 

Las patas de hierro están fabricadas principalmente en acero de alta resistencia, lo que les confiere una durabilidad excepcional. Este material es elegido por su capacidad para soportar grandes cargas y resistir el desgaste con el tiempo. 

Acabado de las patas de hierro

Además, muchas de estas patas reciben un tratamiento anticorrosivo que consiste en la aplicación de capas protectoras para prevenir la oxidación, ampliando así su vida útil incluso en condiciones ambientales adversas. 

El acabado final se realiza mediante un proceso de pintura electrostática, que no solo protege la superficie del acero de agentes externos, sino que también mejora la apariencia estética del producto, proporcionando un acabado suave y uniforme.

Dimensiones

Las dimensiones de las patas de hierro son variadas, con alturas que oscilan entre 30 cm y 100 cm, lo que permite adaptarlas a diferentes tipos de muebles y necesidades de diseño. En cuanto al diámetro o ancho, estas patas pueden variar desde 2 cm hasta 8 cm. 

Forma de las patas de hierro

Además, están disponibles en diversas formas como cuadradas, redondas y rectangulares, lo que ofrece una gran flexibilidad para integrarlas en diferentes estilos de muebles. El espesor del material, que va desde 2 mm hasta 5 mm, asegura que las patas proporcionen estabilidad y firmeza, siendo una opción ideal para soportar estructuras pesadas y mantener su forma bajo presión.

Peso

El peso de cada pata puede variar significativamente dependiendo de sus dimensiones, desde 1 kg hasta 5 kg. 

Capacidad de carga de las patas de hierro

Estas patas son capaces de soportar cargas considerables, con capacidades que van desde 50 kg hasta 200 kg por pata. Esta capacidad de carga depende del diseño específico y del grosor del acero utilizado en su fabricación. Están diseñadas para aplicaciones que requieren un soporte robusto, lo que las hace ideales para mobiliario que debe sostener equipos pesados o grandes volúmenes.

Color y personalización

En cuanto a las opciones de color, las patas de hierro están disponibles en colores estándar como negro, blanco y gris, lo que permite una fácil combinación con una amplia gama de estilos y decoraciones de interiores. 

Sin embargo, para aquellos que buscan un toque más personalizado, es posible solicitar colores específicos bajo pedido, permitiendo a los diseñadores y propietarios de muebles crear piezas verdaderamente únicas que se adapten a sus preferencias estéticas.

Método de fijación y ajustes de las patas de hierro

Vienen equipadas con tornillos y placas de montaje, lo que facilita su instalación en una variedad de superficies y estructuras. Algunos modelos también ofrecen la posibilidad de ajuste de altura, integrando mecanismos que permiten modificar la altura de la pata, ya sea manualmente o mediante sistemas de liberación rápida.

Resistencia y refuerzos internos

La resistencia de las patas de hierro se ve mejorada gracias al tratamiento térmico al que son sometidas, lo cual incrementa su capacidad para resistir impactos y deformaciones. 

Además, para aplicaciones que requieren un soporte aún mayor, algunos modelos incorporan refuerzos internos. Estos refuerzos proporcionan una estructura adicional dentro de la pata, aumentando su capacidad para soportar cargas sin comprometer la integridad del material.

Aplicaciones versátiles de las patas de hierro

Las patas de hierro son extremadamente versátiles y pueden utilizarse en una amplia gama de aplicaciones, desde mesas y escritorios hasta bancas y otros tipos de mobiliario. Son adecuadas tanto para uso en interiores como en exteriores, y están disponibles con opciones especiales que ofrecen resistencia adicional al clima, asegurando que puedan soportar la exposición a los elementos sin deteriorarse.

Modelos de patas de hierro

Patas de hierro de 12mm

Son una opción resistente y versátil para la fabricación y restauración de muebles. Con un diseño clásico, están elaboradas en hierro de alta calidad, proporcionando estabilidad y durabilidad. Sus dimensiones de 50 cm de altura, 50 cm de largo y 0,8 cm de diámetro las hacen ideales para diversos usos, desde mesas hasta bancos y estanterías. 

Su estructura delgada pero firme permite combinarlas con diferentes materiales, como madera, vidrio o melamina, adaptándose a distintos estilos decorativos y necesidades funcionales.

Patas de hierro REI 971.21 

Ofrecen una combinación de resistencia y estilo moderno, ideales para muebles como mesas, escritorios y estanterías. Fabricadas en hierro de alta calidad, cuentan con una terminación en cromo brillo, que no solo aporta un toque elegante, sino que también brinda mayor protección contra la corrosión y el desgaste. 

Sus dimensiones de 100 mm de altura y 45x45 mm de ancho las hacen una opción compacta y funcional, perfecta para muebles de distintos estilos y usos. Gracias a su diseño robusto y acabado pulido, estas patas garantizan estabilidad y durabilidad en cualquier tipo de superficie.

Patas de hierro para mesas de arrime 

Son una opción resistente y versátil para complementar cualquier espacio. Fabricadas con hierro de 8 mm de espesor y 32 cm de altura, ofrecen una base sólida y estable para mesas auxiliares, mesas de apoyo o muebles de estilo industrial y rústico. 

Su diseño rústico y duradero permite que puedan usarse tanto en interiores como en exteriores, adaptándose a distintos materiales de tapa, como madera, vidrio o mármol. Además, pueden pintarse en diferentes colores, brindando la posibilidad de personalizarlas según el estilo del ambiente. De fácil colocación, son una solución práctica para quienes buscan estabilidad y diseño en sus muebles.